A borde de las lágrimas, el padre de familia señaló que este problema lo han vivido por más de dos años, pero ya ha escalado a niveles que son insoportables para los demás menores, y ellos como su familia.

Por Redacción GH  18 de septiembre 2024

Padres de familia de la Primaria Leo Sandoval Saucedo, en Villa Bonita, se manifestaron frente a la institución para exigir que retiren a un niño de 5 grado de la escuela, debido a que ha violentado a sus compañeros desde hace dos años, de manera verbal, física e incluso sexual.

“Tenemos dos años con un tema muy serio en la escuela, pero la directora y las autoridades más inmediatas no nos han dado una respuesta contundente y real, y es un tema bastante delicado que afecta la seguridad de nuestros hijos”, manifestó Fernando Molina, en representación de todos los padres.

Hay un niño agresor, es un tema muy delicado porque nos está violentando a nuestros hijos, psicológica, mental y físicamente, con temas que no van acorde a la edad de un niño de primaria”, mencionó.

A borde de las lágrimas, el padre de familia señaló que este problema lo han vivido por más de dos años, pero ya ha escalado a niveles que son insoportables para los demás menores, y ellos como su familia.

Buscan proteger a sus hijos

Aseguró que su intención y la de todos los padres de familia no es afectar al menor agresor, pero sí proteger a sus hijos, y que el niño reciba la atención sicológica que requiere, antes de poder reintegrarse al grupo.

“En otras ocasiones argumentaba la directora que el papá no tenía los recursos para pagarle un sicólogo, pero sabemos de instituciones públicas que te dan el servicio sin ningún costo, entonces evidentemente algo sigue pasando en casa o en el ámbito familiar del menor, que es una preocupación.

Si bien el derecho del niño es la educación, el de nuestros hijos también, y en un lugar seguro, pero entonces resulta que con toda la confianza venimos y dejamos a nuestros niños, y aquí los están violentando; por seguridad, lastimosamente, pedimos que lo retiren del grupo y se encuentre un tratamiento acorde a sus necesidades, y sí se tiene que llegar a una instancia como el DIF, que se tenga que hacer, lo que se tenga que hacer”, expuso.

Molina, junto a otros padres de familia, ingresaron a la institución con autoridades de la Secretaría de Educación y Cultura, para tener una junta y buscar soluciones al problema.

De no haber una solución, Fernando y otros padres de familia aseguraron que iban a cerrar calles, pero que no iban a permitir que la situación siguiera escalando de esa forma.